Su espectacular físico, que enamora a primera vista, se ve
eclipsado por su simpatía, su saber estar y su inteligencia. Pablo
Martín, mister España 2001, visitó ayer la Isla para inaugurar el
nuevo balneario urbano de Palma, Hidrópolis.
-Hace poco tiempo que se ha incorporado a la serie «Ana
y los siete», ¿qué tal está yendo la experiencia?
-Muy bien, es una serie con mucha audiencia y es un gran
escaparate. Hay mucha gente trabajando en ella que lleva mucho
tiempo, y adaptarme en tan poco tiempo está siendo complicado.
-¿Cómo es trabajar con Ana Obregón?
-Es muy buena comunicadora, una gran trabajadora y muy inteligente,
sabe lo que funciona y lo que no. Está muy atenta siempre a
todo.
-Además de por su trabajo, la gente conoce a Ana Obregón
porque es el blanco de la prensa rosa, ¿cómo os afecta a vosotros,
sus compañeros?
-A veces comentamos en broma todos los nuevos novios que le ponen y
nos echamos unas risas.
-Y a usted ¿cómo le trata la prensa del
corazón?
-Bien, aunque tampoco le doy motivos para que me trate mal. Yo me
dedico a trabajar. Los periodistas de la prensa rosa tienen todo mi
respeto, pero yo no tengo nada interesante que contarles sobre el
corazón.
-Pero, ¿es consciente de que su paso por «La Isla de los
famosos» le pudo relacionar en su momento con este
mundo?
-El que quiere aprovecharse de este mundo, lo hace
independientemente del programa en el que participe. A mi salida de
«La Isla de los famosos» me deprimí bastante porque me di cuenta de
que lo habían vendido como un reality cuando en realidad era una
experiencia humana inolvidable. A mí me permitió conocerme a mí
mismo.
-¿Ir de guapo le ha perjudicado en su
profesión?
-La verdad es que me ha tocado trabajar como el que más. El físico
es un punto a tu favor, pero luego tienes que valer y demostrarlo.
A mí me ha tocado trabajar mucho y equivocarme mucho, pero todos
intentamos aprender de los errores corrigiéndolos y evitar que se
reproduzcan.
-Pero hay gente que puede pensar que usted se metió en
este mundo gracias a su físico, ya que ganó un concurso de belleza,
como es el de Mister España.
-Yo no me había planteado dedicarme a este mundillo, pero estaba
acabando la carrera de Psicología y surgió lo del certamen.
Después, poco a poco me fui introduciendo en la interpretación.
-¿Qué piensa sobre la polémica surgida en el certamen de
Miss España de hace un par de años?
-A todos los que estábamos relacionados con el concurso nos salpicó
y te das cuenta de que hay muchos intereses creados. Este certamen
es como una franquicia y como en toda empresa surgen
irregularidades y hay gente que lo lleva mejor que otra.
-¿Cine, televisión o teatro?
-Todo lo relacionado con la interpretación me encanta.
Samantha Coquillat
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