Juan Mestre26/03/05 0:00
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Los pescadores denunciaron ayer que los peixeters venden a los consumidores hasta diez veces más caros los productos que compran en sa Llonja de Palma y sostienen que este es el auténtico motivo del conflicto que ha enfrentado a ambos sectores durante estos días y que ha dejado los mercados sin pescado mallorquín. A modo de ejemplo, un kilo de salmonetes que se compra en sa Llonja por 0,50 euros, llega a los consumidores hasta diez veces más caro: unos 5 euros el kilo. Un kilo de gambas que en la Llonja se consigue por apenas 20 euros se vende en los puestos de mercado por 60 euros. Así lo denunciaron ayer dos representantes de los pescadores, José Bonnín y Vicente Gil, quienes aseguran que la barrera que se ha colocado en la Llonja para evitar que los mayoristas puedan acceder a todas las cajas de pescado «sólo es una excusa para no comprarnos nuestras capturas y seguir controlando los precios». «No es lógico que nosotros vendamos los pescados a unos precios y en los mercados lleguen al consumidor hasta diez veces más caros; nosotros tenemos graves problemas para mantener la flota y esto no es justo», explicaron Bonnín y Gil.

Pero la situación puede cambiar el martes. A partir de las 17 horas, sa Llonja de Palma -también las de Sóller y Andratx- estarán abiertas al público minorista. «El pescado que no vendamos en subasta por la mañana, saldrá a la venta por la tarde y cualquier ciudadano podrá venir a comprar», señalaron los dos pescadores. Ellos consideran que «no tiene ningún sentido que tengamos que tirar el pescado que no quieran los mayoristas». Este Jueves Santo, los pescadores distribuyeron casi 3 toneladas de pescado gratis entre distintas residencias de la tercera edad. Y lo seguirán haciendo en el futuro si se mantiene el conflicto entre pescadores y peixeters. «Nos oponemos a tirar el pescado a la basura; no lo vamos a consentir a partir de ahora», reiteraron.