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El general Luis Peláez-Campomanes (Madrid, 1943) será recordado por muchos aspectos positivos en Balears, pero especialmente, las futuras generaciones verán en él al militar que dirigió la modernización del Ejército en las Islas. Durante los dos años y siete meses con mando en Balears (fue nombrado comandante general el 27 de septiembre de 2002), Peláez-Campomanes afrontó con éxito diversos desafíos, entre ellos, la transición del militar de reemplazo al profesional, el cambio de la estructura territorial que hasta ahora tenía el Ejército de Tierra a nivel nacional, la reforma de las instalaciones de la base General Asensio y la puesta en marcha de convenios con las instituciones de las Islas.

El teniente coronel Antonio Ortiz, que le conoce muy bien, destaca de su superior su «gran cultura militar, basada en su experiencia en los distintos destinos, su conocimiento detallado de la organización del Ejército, de su funcionamiento, tras participar en muchas misiones internacionales por todo el mundo».

El general Luis Peláez-Campomanes, casado, tres hijos, está en posesión de numerosos condecoraciones militares nacionales y extranjeras, y se va (oficialmente pasa a la reserva este domingo) dejando un excelente recuerdo en Balears. Mañana, precisamente, se celebrará el acto de despedida a las 12.00 horas en la Base General Asensio.

Durante su mandato, 400 militares de Balears participaron en las labores de limpieza de hidrocarburos en las costas gallegas. Asimismo, por primera vez, el cuartel general de la OTAN en España celebró un ejercicio lejos de su base de Valencia, y eligió Palma, con la participación de más de 2.000 hombres y 500 vehículos (Ejercicios Hirex 2003).

Con Peláez- Campomanes al frente del Ejército en Balears, se incrementaron los ejercicios de refuerzos hacia la Isla en Menorca y Eivissa mediante helitransporte desde Mallorca, con ensayos de operaciones de refuerzo ante una eventual crisis.

También, se firmaron diversos convenios con instituciones, entre los que destaca el acuerdo con el Consell d'Eivissa para la formación de discapacitados psíquicos en módulos de formación profesional, que estuvieron en el acuartelamiento de Sa Coma.

En el aspecto de organización, Peláez-Campomanes coincidió con el cambio de la estructura territorial que hasta ahora tenía el Ejército de Tierra a nivel nacional, ya que eran regímenes militares (antiguas Capitanías), pero desde principios de este año ha pasado a ser una estructura funcional que debe culminar en julio de este año. Es decir, habrá un mando de fuerzas terrestres, un mando logístico y una inspección general. Balears, entonces, pasará a depender de la fuerza terrestre en Sevilla a partir del próximo 15 de mayo. Esta innovación afectará a diversas unidades de Balears.