Una delegación de mujeres de Burundi se encuentra en Mallorca,
donde hasta el domingo mantendrán sesiones de trabajo con entidades
e instituciones para concluir con la elaboración de un documento en
el que se especificarán sus demandas y necesidades de cara a la
reconstrucción del país africano.
Y es que la guerra ha acabado en Burundi, según explicó el
presidente de Veïns Sense Fronteres, Jaume Obrador, «después de que
el último grupo guerrillero firmara el alto el fuego el pasado
lunes».
Estas mujeres se encuentran en Palma invitadas por VSF, con el
objetivo añadido de hacer oír la voz de las mujeres de este país
africano, «que se han convertido en el motor de la paz y el
desarrollo de Burundi», aseguró Obrador.
La delegación está compuesta por Pascasie Minani, mujer del ex
presidente democrático Silvestre Ntibantunganya, periodista de
profesión y que actualmente dirige una fundación y una red de ONG
de la que forma parte VSF, y Marguerite Bukuru, ex ministra de
Derechos de la Persona y de Promoción de la Mujer y ex jueza de
primera instancia. Junto a ellas, han llegado Générose
Ngandanganya, teniente coronel del principal grupo guerrillero FDD
que en 2003 firmó el acuerdo de alto el fuego con el gobierno de
transición; Ancile Ntirwihisha, maestra y actualmente dinamizadora
de la ONG Abazimyamuriro Bazira Imbibe, socia local de VSF, y hoy
llega Libérate Nicayenzi, de origen pigmeo y diputada de la
Asamblea Nacional.
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