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El colegio público Jaume I fue escenario ayer tarde del octavo encuentro anual familiar de los miembros de la Associació Illes Balears d'Adopcions. Allí se dieron cita familias con sus hijos biológicos y adoptados, además de familias a punto de ir al encuentro de sus hijos y otras que están tramitando la adopción.

La asociación organizó una fiesta en la que los pequeños pudieron disfrutar de actividades tales como dibujo, animación infantil, juegos en castillos hinchables, paseos en poni y merienda que aportaron las socias. El presidente de la asociación, Ramón Rotger, destacó que «el motivo de la fiesta es hermanar a los socios y potenciar el mundo de la adopción y acogida de niños para que puedan tener un hogar y conocer el camino más fácil y seguro para no caer en manos de intermediarios no deseados».

Según Rotger, Balears, administrativamente, es una de las comunidades que en este aspecto que mejor funciona, aunque se puede mejorar. La mayoría de niños de adopción internacional -que no debe sobrepasar los 12.500 euros por trámite- procede de Rusia. Siguen China, India, Etiopía y otros países menos significativos además de los nacionales.

Amalia Estabén