Tres nuevas juezas adjuntas, que han sido destinadas a juzgados de
Palma, Inca y Eivissa, juraron ayer su cargo ante el presidente del
Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB), Antoni Terrasa, en
un acto que contó con la asistencia del presidente de la Audiencia
de Palma, Carlos Gómez, el fiscal jefe de Balears, Bartomeu
Barceló, el juez decano de Palma, Francisco Martínez y numerosos
magistrados.
Las nuevas nuevas juezas paliarán, en parte, la escasez de
plantilla que afecta a las máximas instancias judiciales de las
Islas, ya que siguen sin ser resueltos más de 50.000 asuntos. Su
función será la de apoyar a los magistrados titulares en sus
respectivas jurisdicciones. En concreto, Gema Amparo Sánchez Pina
pasa a ser juez adjunta del Juzgado de Guardia de Eivissa; Catalina
Martorell Alomar, juez adjunta del Juzgado Penal Número 8 de Palma;
y Catalina Mulet Gual, juez adjunta del Juzgado Número 1 de
Inca.
En sus palabras de bienvenida, el presidente del Tribunal
Superior destacó el papel que las nuevas titulares de los juzgados
de Palma, Inca y Eivissa desempeñarán en cuanto a «mejorar la
convivencia democrática», así como en la defensa de los Derechos
Humanos, por lo que consideró que en su labor siempre debe
«preponderar el derecho frente a la arbitrariedad».
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