Tráfico fuera de los cascos urbanos

Los tiempos han cambiado. Antes, los pueblos ansiaban carreteras que pasasen por el centro de la población. Suponía un revulsivo económico en torno a la que surgieron comercios. Económicamente y urbanísticamente se creció en torno a las carreteras comarcales. Pero el tráfico que en principio fue beneficioso ha pasado a convertirse en un peligro. Un ejemplo de esta evolución eran las travesías de Vilafranca o Llucmajor, municipios donde las carreteras ya formaban parte del centro de la localidad y el intenso tráfico las transformó en vías inseguras.

Gonzalo Aguiar, jefe del Departament de Carreteres del Consell de Mallorca, indica que la creación de variantes es ya una necesidad acuciante en numerosos municipios de Mallorca.

En estos momentos, el Govern de les Illes construye las vías de circunvalación de Manacor (sur), Son Ferriol y Sant Llorenç des Cardassar y recientemente ha inaugurado la de Inca sur. Los proyectos de Manacor e Inca era obras reinvindicadas hace años dado el caótico tráfico del interior de las ciudad. Ahora se han emprendido estas obras aunque no solucionarán del todo el problema. En Inca es urgente también la variante norte y en Manacor la variante sur. Con estos ejes, las dos ciudades más importante de la Isla, después de Palma lograrían, ordenar la circulación y sacar el tráfico más pesado de la ciudad y conectarlo con otras vías importantes de la red.

La variante de Son Ferriol es de obligada construcción para completar el proyecto de desdoblamiento de la carretera de Manacor. En estos momento un intenso tráfico colapsa el núcleo de Palma.

En obras también está la variante de Sant Llorençs, un proyecto que no es de los más prioritarios, pero del que se beneficiarán los conductores habituales de esta zona del Llevant de Mallorca.