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El otoño concluyó anteayer en las Islas con un balance meteorológico más seco de lo normal y con temperaturas dentro de lo habitual, aunque con una ligera tendencia a la baja, más acentuada en lo que llevamos de diciembre, según explicó a este periódico José Antonio Guijarro, del Centre Meteorològic Territorial de Balears. La anomalía de lluvias interanual (balance pluviométrico del último año) arroja un déficit del 19 por ciento en Menorca (sequía moderada), del 17 por ciento en Mallorca y un superávit del 18 por ciento en Eivissa. A estos datos ha contribuido la falta de lluvias, con excepciones puntuales, desde el pasado octubre en Balears. Así por ejemplo, en octubre, en Palma llovió un tercio de lo que es habitual, en Son Sant Joan menos de la mitad y en Lluc y Porreres, un poco más de la mitad. Sin embargo, en Pollença llovió más de lo que es normal en octubre y en Capdepera, de manera excepcional, más del doble.

En noviembre, tanto en Palma como en Lluc y Porreres llovió por debajo de la media del mes, aunque la diferencia no fue tanta como en octubre. En los primeros 21 días de diciembre se han repetido los registros inferiores a la media de ese período del mes. Así por ejemplo, en Palma las precipitaciones sumaron 9 litros por metro cuadrado, cuando la media es de 34. En Porreres, la situación está más estabilizada. Llovieron 35 litros y la media de los 21 días es de 39. En Lluc, se registraron 74 litros, muy por debajo de su media de 119. En el caso de Mallorca, si sólo tomamos diciembre, el déficit de precipitaciones alcanza el 50 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior.

En cuanto a las temperaturas, los últimos días de septiembre se ciñeron bastante a lo que son los valores térmicos medios de ese período. En octubre, las temperaturas fueron, en términos generales, un grado superiores a lo normal. Sin embargo, en noviembre, los valores medios se mantuvieron por encima de lo normal, sólo unas décimas, hasta iniciar un descenso que se ha visto acentuado durante los 21 primeros días de diciembre, cuando las temperaturas, según las zonas, oscilan entre un grado y un grado y medio por debajo de las respectivas medias. Guijarro apuntó que «las subidas de un mes y las bajadas de otro han equilibrado el balance de temperaturas del otoño, pero el grado o grado y medio por debajo de lo normal que se está registrando en diciembre se está notando bastante con un intenso frío».