Los días de Nochebuena y Navidad son jornadas en que las emociones
están a flor de piel. Precisamente son los más pobres, los más
desfavorecidos, los que se encuentran más necesitados de calor
humano.
Sin embargo, en Mallorca son muchas las personas que se
encuentran en plena indigencia, sin prácticamente nada que llevarse
a la boca.
Afortunadamente, hay también gente e instituciones preocupadas.
Jaume Santandreu, párroco de los pobres y coordinador del centro de
acogida de Can Gazà, asegura que «realmente el día de Nochebuena lo
tenemos muy difícil, ya que la gente recuerda a su familia y su
vida, y hay personas que se ponen muy tristes. Es una noche dura.
Pero desde Can Gazà intentamos poner remedio a tanta desolación.
Para ello montamos una noche en Cas Compte de Santa Margalida -el
propietario nos regala la cena-, y reunimos a toda la gente que se
siente desamparada.
El año pasado fuimos unos 300. Allí comemos, celebramos la misa
del gallo y oímos la sibil.la de Maria Antonia Gomila. Todo el
mundo que se sienta desamparado puede acudir a nosotros,
simplemente tiene que llamar aquí antes de las 19.30 de hoy, y
podrá unirse a nosotros».
Con motivo de las fiestas de Navidad los diferentes centros que
conforman la Xarxa d'Inserció Social que dependen del Institut
d'Afers Socials i Esportius de Mallorca celebrarán la Nochebuena y
la Nochevieja. Generalmente, los centros de acogida no ofrecen
servicio de alimentación, pero con motivo de las fiestas se
organizan dos cenas a los usuarios de los centros (especificados en
la columna de la derecha). Los menús de las dos cenas son, según
datos ofrecidos por el propio Institut: para hoy, crema de
castañas, lenguado tropical, peras «bella helena», turrón y
moscatel.
Para la noche de Nochevieja, se servirá caldereta de pescado
perfumada al hinojo, pavo de «San Silvestre», uvas de las suerte,
turrón y cava.
Esta red de inserción social tiene como objetivo ofrecer a las
personas en riesgo de exclusión social (marginados y transeúntes)
un lugar de referencia estable donde cubrir sus necesidades
básicas. El mismo Santandreu comenta que «los de Can Gazá hemos
regalado una 'porcella' a los de Ca l'Ardiaca, el centro de acogida
que está al lado del cementerio. Intentamos ser solidarios los unos
con los otros».
Hay que tener en cuenta que los destinatarios de estos servicios
son personas con graves problemas a nivel personal (por adicción a
diversas drogas, por enfermedades graves e invalidantes, tanto
físicas como psíquicas).
El centro Zaqueo, situado en pleno «barrio chino» de Palma
también está preparado para acoger a los más pobres.
El Menjador de Transeunts, que gestiona S'Institut, acogerá
todos aquellos casos de urgente atención alimentaria, sobre todo
para el colectivo de adultos y mayores de edad, sin ningún tipo de
ingresos.
Numerosas parroquias católicas también irán ofreciendo caridad
durante estos días especialmente difíciles.
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