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Los duques de Palma, doña Cristina y don Iñaki Urdangarín, asistieron ayer, a las 10.30 horas, a la misa que tuvo lugar en la Seu con motivo de la festividad de Sant Sebastià. Recibieron a los duques de Palma a la entrada de la Catedral el obispo de Mallorca, monseñor Jesús Murgui; el presidente del Govern, Jaume Matas; la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Munar; el presidente del Parlament, Pere Rotger; la alcaldesa de Palma, Catalina Cirer; y también el delegado del Gobierno en Balears, Ramon Socías, entre otras personalidades civiles y militares. Asistieron también a la misa representantes del Govern, del Consell y la casi totalidad de ediles de Cort, así como cientos de ciudadanos.

La eucaristía, que se desarrolló en su integridad en catalán, estuvo presidida por monseñor Jesús Murgui. Durante su homilía, anunció que a lo largo de este año tendrán lugar diferentes actos de conmemoración relacionados con el hecho de que el 6 de febrero de 1306, es decir hace casi 700 años, aparece la primera referencia documental a la Seu, en concreto a la futura capilla de la Trinidad, en el testamento del rey Jaume II. Previamente, monseñor Murgui había destacado en su homilía que para los cristianos Dios está siempre al lado de las personas más necesitadas. «Dios no quiere el sufrimiento, pero sí ama a los que sufren», dijo.

Poco después de iniciarse la misa, un hombre mayor se sintió indispuesto, por lo que se requirió la presencia de un médico. Precisamente, una de las ediles del PSOE en Cort, Iciar Miranda, es doctora, por lo que fue la persona que le atendió en un primer momento. Posteriomente, fue atendido, ya en el exterior de la Seu, por un equipo médico que llegó en ambulancia.

Tras la eucaristía, los duques de Palma abandonaron la Seu y saludaron cariñosamente a las personas que esperaban su salida fuera del templo.

Josep Maria Aguiló
Fotos: Pere Bota