El PP presentará en solitario una propuesta de reforma del Estatut d'Autonomía si finalmente no se recupera el consenso que, sorpresivamente, se rompió ayer cuando todo apuntaba a un principio de acuerdo.
Ni la financiación ni la definición de Balears ni siquiera las carta de derechos y deberes provocaron la ruptura. La «culpa» la tuvo una cuestión en apariencia menor: las consecuencias de la creación de un consell específico para Formentera, una reclamación inicial del PP que el resto de partidos ha terminado por aceptar a cambio de que el ayuntamiento formenterés sea a la vez consell insular.
Este asunto separó a los 'populares' del resto de partidos políticos representados en la ponencia parlamentaria. El PP propuso reconsiderar un acuerdo cerrado previamente y suprimir una disposición transitoria que establecía un periodo transitorio durante la próxima legislatura entre la elección del Consell de Formentera y la asunción de las competencias. La consecuencia política de ese cambio es que el Consell de Eivissa pasará a tener 13 representantes de Eivissa y no «doce más uno», como tiene ahora. El diputado que se elige en Formentera hace el «número 13» del Consell de las Pitiusas.
Desacuerdo
Nada hacía prever, tras varias horas de reunión, que el Estatut volvería a encallar. Estarás y Huguet indicaron que se recupere o no el consenso, se mantendrá el calendario de reuniones previsto para la ponencia. El PP, si no consigue otros apoyos, asumirá como suyas las conclusiones de la ponencia y lo presentará como una proposición suya.
La «bomba» (ese fue el término utilizado por el nacionalista Eduard Riudavets) estalló a las 13,30. A esa hora el PP informó de que quería modificar un disposición transitoria que establecía un periodo transitorio hasta 2011. Hasta ese año «convivirían» un Consell de Formentera y un Consell de Eivissa con un representante de Formentera. Joan Huguet, coordinador de la ponencia, explicó que cuando se introdujo esa cláusula no estaba claro que el Estatut estuviera en vigor antes de las próximas elecciones. Rosa Estarás señaló que «no tendría sentido» que se eligiera el Consell de Formentera y que, a la vez, un diputado de esta isla formara parte del Consell de Eivissa. Los portavoces de los grupos de oposición, uno a uno, acusaron al Partido Popular de «bloquear» el Estatut. Por contra, la vicepresidente Rosa Estaràs inició su comparecencia ante los medios de comunicación, con estas palabras: «Hemos conseguido desbloquear el Estatut».
En realidad, el acuerdo alcanza a la práctica totalidad del proyecto si bien todos los partidos se reservan la posibilidad de presentar enmiendas. Por ejemplo, UM se opone a las listas separadas para los consells y el Parlament pero no hará bandera de este asunto, según dijo el representante del partido nacionalista en la reunión celebrada ayer en la sede de la vicepresidencia. UM no envió a ninguno de sus primeros espadas a la cita. Acudió Matías Barón, dirigente de la ejecutiva y secretario del grupo parlamentario. En representación del PSIB acudieron Francina Armengol y Joana Barceló. Por el PSM, Eduard Riudavets. Miquel Rosselló y Miquel Angel Llauger fueron en nombre de EU-Els Verds. Joan Huguet por el PP.
Rosa Estaràs lamentó que esta cuestión haya empañado una reunión que, hasta las 13.30 horas (empezó a las diez) había transcurrido con consenso, pues se habían logrado acercamientos en temas como la financiación, al aceptar el PSOE una inversión adicional estatal en diez años de 3.000 millones de euros.
La portavoz socialista, Francina Armengol, vio un interés electoral en esta estrategia y recordó las dificultades que tendría el Consell de Formentera para asumir las competencias en pocos meses.
Para la secretaria general de los socialistas de Mallorca, la actitud del PP, que ha actuado «de mala fe», pone de manifiesto que hay presiones del PP nacional para que no se apruebe en las comunidades que gobierna este partido un Estatuto que se pueda parecer al de Cataluña.
La estrategia de Rajoy
La presidenta del grupo parlamentario socialista, Joana Barceló, vio muy difícil alcanzar un acuerdo en las actuales circunstancias, aunque esperó que el PP «rectifique» y cambie su postura en aras de alcanzar un consenso que permita tener un nuevo Estatuto de Autonomía esta legislatura autonómica. Muy pesimista salió de la reunión el representante del PSM, Riudavets, quien no dudó en afirmar que el proceso de reforma «está muerto». El PSIB advirtió que un Estatut que sólo tenga el apoyo de un partido no se aprobará en el Congreso. Ayer Estarás desligó totalmente el Estatut balear del catalán. Afirmó que «no se parece en nada». La oposición entiende que es una forma de justificarse ante Rajoy y la dirección estatal del PP. Para EU, la propuesta de reforma se parece «como una gota de agua a otra» al Estatut catalán.
Ponencia: martes, 18. Huguet ha convocado para el martes una reunión de la ponencia, con la intención de elaborar el dictamen. El viernes, como muy tarde, se presentará para su tramitación. Si no se ha recuperado el consenso, el PP lo presentará como propuesta propia. El PP considera irrenunciable la cuestión de Formentera. Todos los grupos piden que se reconsidere.
Pleno y enmiendas. El dictamen será tomado en consideración por el pleno y volverá a la comisión para que los grupos presenten las enmiendas. Será en esa fase del proceso cuando los grupos presenten las distintas propuestas y decidan si mantienen los votos particulares. Todo ese proceso de debate en comisión deberá estar listo antes del 13 de junio.
Posible aprobación definitiva: 13 de junio. Sobre el 13 de junio se llevará nuevamente al pleno del Parlament. Ese día se aprobará definitivamente en el pleno. Como el PP tiene mayoría absoluta, podría aporbarlo exclusivamente con sus votos. Después de la aprobación por el pleno de la Cámara, el Parlament balear elegirá a las personas que defiendan el texto en el Congreso.
Debate en el Congreso. El Congreso de los Diputados tendrá que habilitar un día para discutir el proyecto de Balears que defenderán ante el Congreso tres parlamentarios de las Islas. Una vez aprobado y publicado en el BOE entrará en vigor. Técnicamente es posible aprobarlo antes de las elecciones autonómicas de mayo de 2007... si hay acuerdo PP-PSOE.
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