-¿Cuál es la solución definitiva?
-El gran riesgo no son las rissagas sino el tráfico comercial. El puerto necesita sacar el tráfico fuera del puerto. Nosotros hemos presentado el proyecto y el Consell de Menorca, sin competencias, lo ha parado, pero tendrán otras propuestas alternativas. Que elijan las que quieran sin dilación y con humildad haremos lo que quiera el Consell de Menorca.
-¿Cuándo estaría construido el dique de Ciutadella?
-Si nos dejan hacer el proyecto que ya tenemos, desde hoy y antes de tres años el dique estaría acabado y en funcionamiento. Es innegociable no dar una solución al tráfico comercial. Presentaremos varias alternativas y que elijan una. Ese es mi compromiso con Ciutadella.
-¿Ha vivido sus momentos más difíciles como president?
-La noche del jueves al viernes, después de conocer lo ocurrido en Ciutadella, fue la peor desde que soy presidente. No quiero volver a pasar nada igual. Si Dios no nos llega a ayudar, en Ciutadella hubiese habido una catástrofe. Que esto sirva para que se tome una solución.
-¿Se ha aprobado un buen Estatut?
-Sí. El valor añadido del Estatut es el acuerdo y es el mejor mensaje que hemos podido dar los políticos a los ciudadanos de Balears. Hemos sido capaces de ponernos de acuerdo. Los que han votado en contra, también han hecho un gran esfuerzo con el Estatut.
-Pero no ha sido fácil negociar con Francesc Antich...
-El acuerdo es el mismo que habíamos negociado el jueves anterior. En el último momento el PSOE no aceptó, pero no se ha cambiado ni una coma. La base del acuerdo se produjo el martes con mi intervención. Pedí un cheque en blanco a cambio de nada al PSOE. Yo lo tenía claro: había que hacer un ejercicio de generosidad para que el Estatut no se parara. Y siempre he dicho que la financiación es lo más importante del Estatut y no me quiero ni imaginar que por diferencias entre políticos pudiésemos perder 3.000 millones.
-Pero no ha sido posible incluir el nuevo Régimen Especial, que era una de sus grandes apuestas...
-Sí, es cierto, pero yo creo que hemos de seguir trabajando para que nuestras empresas tengan las mismas condiciones que Canarias en materia de insularidad. Yo le dije a Antich que seguiré luchando para que se reconozcan nuestros derechos. No renuncio a intentarlo y algún día caerá por su propio peso.
-¿Cree que Solbes se «pasará por el forro» la cláusula de los 3.000 millones?
-Me arrepiento del lenguaje que utilicé. Me equivoqué, pero creo que sería un gran error que todos los estatutos pidan el oro y el moro al Estado. Los ministros de turno, ni aún queriendo, podrán cumplir lo que los estatutos les exigen.
-Y usted quiere negociar el Estatut en el Congreso...
-Por las razones que sean, estoy en condiciones de defender que el único interlocutor para negociar el Estatut, es el PP balear y yo mismo. Lo que quiero denunciar es que en Madrid, PP y PSOE no utilicen el Estatut como arma arrojadiza. No lo aceptaré bajo ningún concepto porque le hace un flaco favor a los intereses de Balears. Qué nos dejen en paz y que podamos defender nuestro Estatut. Nosotros hemos dado una gran lección.
-Si sale un buen Estatut, ¿será mérito de Matas y Antich?
-Será mérito de todos, incluso de los que han votado en contra con la boca pequeña. Mire, el tema del catalán era absurdo y no entiendo la postura de los socialistas. ¿Irá Francesc Antich a la agrupación socialista de Calvià para defender que conocer el catalán sea una obligación de los ciudadanos de Balears?
-¿Es cierto que la elección de Son Espases se hizo en una comida en Madrid en la que usted estaba presente?
-A mí lo que me preocupa son las cosas que son ciertas. Doy mi palabra de honor, la de mi familia, que jamás se me pasó por la cabeza la ubicación de este hospital. Fue una decisión pactada y transparente. Es tan absurda la acusación que demuestra que la intención es paralizar el hospital. No me preocupa lo más mínimo las falsedades y si tienen alguna prueba o acusación, que vayan a los tribunales. Lo que les pido es que cuando les quiten la razón, que sean capaces de aceptarla.
-¿Qué ha supuesto para su Govern toda la polémica que envuelve la construcción de las carreteras de Eivissa?
-Los políticos de izquierdas critican las carreteras porque querían inaugurarlas ellos. Me hará mucha gracia ver a los dirigentes socialistas circular por la autopista que va de Inca a Sa Pobla. Es imposible estar en contra de todo y ninguna de las carreteras ha sido aceptada por la izquierda. El problema es que ellos, en cuatro años, no fueron capaces de hacer carreteras. Dentro de un año pasaremos cuentas. Hemos demostrado que este Govern, gobierna.
-¿Esperaba lo que ha ocurrido con el edificio de GESA?
-Es un tema cerrado. Si quieren proteger el edificio de GESA, no es mi responsabilidad. El Palacio de Congresos va a hacerse, pero a mí me gustaría saber si ahora se construiría el edificio de GESA en la fachada marítima. En Balears es difícil hacer cosas importantes. Hay que luchar con guerras de guerrillas que a veces esconden muchas miserias.
-¿Cómo calificaria la actitud de Munar con el tema del edificio de GESA?
-No tengo quejas sobre la lealtad de UM. Munar ha alegado motivos técnicos para proteger el edifico y yo no voy a cuestionarlos.
-¿Hay dirigentes de su partido que ya habrían roto el pacto con UM?
-Sí, claro, pero el pacto se llevará hasta el final. El PP firma pactos para cumplirlos. Y el que firmamos con UM, ha sido muy importante para Balears.
-¿De qué se siente especialmente satisfecho en su gestión durante estos tres años?
-Para mí, lo más importante es que la sociedad ha recuperado la confianza.
-¿Su gran objetivo para el futuro?
-Quiero modernizar Balears.
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