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Música, deporte y excelente ambiente se dieron cita ayer sábado en la segunda edición de «Surf Action», que se celebra este fin de semana en la Platja de Palma. Una jornada que comenzó a primera hora de la mañana con exhibiciones de «Wakeboard», una atractiva y emocionante modalidad que muchos no dudaron en contemplar desde la orilla de la playa. El temporal de viento y mar que esta semana azotó Mallorca hizo que la playa estuviera inundada de algas lo que provocó que muchos no disfrutaran del espectáculo en su máximo esplendor dándose un chapuzón. En la arena, mucha chica tomando el sol y chicos luciendo palmito, el impresionante despliegue y montaje en la playa hizo vibrar a los asistentes al más puro estilo americano. El «speaker» animó en todo momento a público y participantes. Puestos y «stands» de información mostraban diferentes tablas de surf, sus modalidades y una gran variedad de artículos, desde ropa hasta accesorios, además de información y la oportunidad de realizar una clase de aprendizaje para los más atrevidos. El «show» de la lanzadera ofrecíó volteretas y malabarismos en el aire con monopatines, patines en línea y bicicletas, toda una espectacular exhibición de los participantes, entre ellos una chica, llamada Fabiola, llegada expresamente desde Brasil. El otro protagonista era el pequeño Patrick, quien a sus diez años de edad demostró su domínio primero en monopatín y horas después cabalgando sobre las olas en «kitesurfing». Sobre el escenario, mucho ritmo, concierto musical y baile «capoeira».

A media mañana llegó Kiril de Bulgaria, gran aficionado al mundo del surf. Lució «look» diferente; atractiva barba canosa, gafas de sol y gorra verde. Kiril se quitó la camiseta, quedándose en bañador, y deprimió a más de uno, su fibrosa figura con abdominales marcadas desvelaban la intensidad de su practica deportiva. El marido de Rosario Nadal, llegó a la playa con su hijo Tasilo y estuvo charlando distendidamente con su cuñado Carlos y con Toni Palerm, director del área deportiva de s'Institut. Finalmente Kiril contempló junto a ellos el espectáculo y realizó fotografías.

Julián Aguirre