Nadal, en la foto junto a Jaume Matas, Catalina Cirer y Francisca Bennàssar, la estrella en Londres.

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La celebración del Día de Balears en la feria Worl Travel Market de Londres, con la presencia mediática del tenista manacorí Rafael Nadal, ha puesto de manifiesto los recelos políticos que hay por parte del Govern y del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio con el plan de reconversión integral de la Platja de Palma, cuyo coste supondrá una inversión global superior a los 1.200 millones de euros en diez años. El ministro de Industria, Turismo y Comercio, Joan Clos, que estuvo en Londres menos de ocho horas en su primera presencia a una feria turística internacional, achacó el parón existente en el inicio del plan de reconversión de la Platja de Palma a una cuestión puramente autonómica, tras ser preguntado sobre el retraso en este proyecto: «Este es un tema autonómico que debe resolverse como tal, pero tenemos voluntad política de afrontarlo», apuntó en el minuto y medio que estuvo en el stand de Balears, mientras Jaume Matas daba su conferencia de prensa un piso más arriba.

El secretario general de Turismo, Raimon Martínez Fraile, apuntó, asimismo, que el Gobierno no tiene constancia de ninguna petición de entrevista de Jaume Matas con Joan Clos por la Platja de Palma, añadiendo que es el Govern el que tiene que «moverse». Asimismo, dijo que el Gobierno central estaba a la espera de que se formalizara el consorcio urbanístico, la elección del gerente y que desconocía el nuevo reparto en el seno del consorcio entre instituciones. «Todo lo que sabemos es a través de la prensa, salvo que el conseller Flaquer me confirmó que el gerente era el que ellos habían propuesto (José Lorenzo Mulet) y no el que había postulado una asociación. Tenemos voluntad política de llevar a cabo este proyecto». El president Matas, sin embargo, explicó ayer que él había solicitado una entrevista con el ministro Clos y que no había recibido contestación. La carta le fue remitida a Clos el pasado 11 de octubre, según confirmaron ayer desde el Consolat de la Mar.

Matas, ante la actitud dilatoria del Gobierno central, anunció que el Govern, «ejecutará el plan de reconversión aunque sea solo, pero queremos el máximo consenso. Si no hay voluntad política de llevarlo a cabo, lo lideraremos nosotros». El delegado de Gobierno, Ramón Socías, respecto a la carta remitida por el Govern, indicó que en la misma no se indicaba nada al respecto, pero que en breve el president Matas recibiría una invitación formal, porque «hay voluntad política para hacer este plan, de crear el consorcio y de que comience a andar en 2007». El Govern recela de esta estrategia de Madrid y no confía en la actitud de colaboración del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.