A estas enmiendas se añade además las referidas a la aprobación del nuevo régimen especial de las Islas y algunas relativas a la mejora de la financiación.
Las enmiendas más conocidas son las que se pactaron la pasada semana en el transcurso de la maratoniana reunión que permitió desbloquear la negociación. De ellas, las esenciales son la que sustituye la cifra de 3.000 millones por una complicada fórmula propuesta por el propio Govern balear y la que elimina el nombre de las modalidades insulares para pasar a denominarlas modalidades de Mallorca, Menorca, Eivissa y Formentera.
Sin embargo, las enmiendas que interesan en estos momentos son las que no se han dado a conocer por parte de los negociadores. No se descarta que uno de esos «ajustes constitucionales» pueda afectar al contenido de alguna de las cuestiones que quedaron cerradas en el Parlament balear por acuerdo de todos los partidos con presencia parlamentaria.
Por lo que respecta a la presentación de las enmiendas, PP y PSOE decidieron presentarles por separado con un intervalo de un cuarto de hora, aunque el contenido de ambas es idéntico. Durante el día de ayer se tuvieron que celebrar nuevos intercambios entre diputados de ambos partidos para tratar de ajustar al máximo el contenido de las enmiendas.
Se espera que la tramitación de la reforma estatutaria sea rápida con el fin de que pueda estar aprobada antes de que acabe la legislatura.
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