Juan Mestre01/02/07 0:00
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El president del Parlament, Pere Rotger, presentó ayer el balance de la actividad parlamentaria del año 2006 y destacó que, por encima de todo, ha intentado compensar a todos los grupos parlamentarios. «No he sido un árbitro casero; me aplaudió hasta la oposición», se sinceró. Rotger, que ha sido criticado en algunas ocasiones por los diputados del PP por ser demasiado flexible con la oposición, reconoció que en algunos momentos no aplica a rajatabla el reglamento. «No soy una persona muy escrupulosa con el cumplimiento del reglamento», comentó Rotger, quien asumió también que cuando fue nombrado presidente de la Cámara no se veía en el papel «porque yo siempre he sido un político de gestión». Rotger no se plantea, en estos momentos, repetir como presidente del Parlament la próxima legislatura. «Mi reto es revalidar la mayoría absoluta en Inca», señaló el president del Parlament.

Ante el próximo periodo de sesiones, Rotger espera que «haya respeto por las personas y las ideas», y calificó de «normal» que la oposición intente aprovechar la recta final de la legislatura par desgastar al Govern. «Todos tienen sus estrategias», agregó.

Rotger destacó la gran actividad parlamentaria desarrollada durante el año 2006. Durante el pasado ejercicio se aprobaron un total de 25 leyes, lo que representa el 50 por ciento de las normativas aprobadas esta legislatura. Por contra, las iniciativas de control al Govern disminuyeron. En total, en lo que a iniciativas legislativas se refiere, se presentaron 29: los 24 proyectos de ley, 2 proposiciones de ley de grupos parlamentarios, 1 proposición de ley por iniciativa popular, 1 proposición de ley del Consell de Mallorca y una propuesta de la Comisión Técnica Interinsular.