Agentes de la Guardia Civil abandonan la sede de la empresa del constructor Felipe Seguí, detenido ayer. Foto: MICHELS

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J.JIMÉNEZ/MICHELS/P.CANDIA
La Guardia Civil abrió ayer la segunda fase policial de la «operación Voramar» contra la supuesta trama de corrupción urbanística en Andratx. Felipe Seguí, un conocido constructor, fue detenido por la mañana y otro empresario fue imputado. Los agentes también efectuaron registros en empresas de Andratx y Palma. La nueva ofensiva se dirige ahora a los constructores y empresarios involucrados en el «caso Andratx». La oficina de Construcciones y Reformas Felipe Seguí está ubicada en el número 33 de la calle Joan Pagés, en Andratx. A las ocho y media de la mañana varios vehículos de la Guardia Civil llegaron a esa dirección e irrumpieron en el negocio. Procedieron a la detención del constructor e iniciaron un exhaustivo registro que se prolongó hasta las dos y media de la tarde. Los expertos policiales se llevaron cajas de documentación, archivos, material informático y facturas, que en los próximos días será analizado.

Felipe Seguí es un empresario muy conocido en Andratx y ha efectuado grandes obras en los últimos años en la zona de Camp de Mar. Antes trabajaba en Palma, pero luego se instaló en Andratx, donde tenía el grueso de su negocio. La segunda fase policial de la «operación Voramar» no ha hecho más que empezar y fuentes de toda solvencia indicaron que en las próximas horas es probable que se produzcan más detenciones, sobre todo de constructores y empresarios. Felipe Seguí está acusado de cohecho, corrupción urbanística y otros delitos. Todo el material intervenido en la primera fase de la «operación Voramar» ha sido clave para desvelar qué constructores se beneficiaron económicamente de construcciones ilegales y de sus contactos «oscuros» en el Ajuntament de Andratx.

Durante la intervención de ayer en Andratx, participó un experto de Hacienda, que analizará la información contable. Por la tarde la Policía Judicial se trasladó a una oficina palmesana, donde se llevó a cabo otro exhaustivo registro. Todo eso ocurrió en Andratx. Mientras, en el Juzgado de Instrucción 12 de Palma, ayer mantuvieron un cambio de impresiones los fiscales Juan Carrau, de Anticorrupción, Pedro Horrach, y dos inspectores de Hacienda, acerca del rumbo que lleva la prolija investigación. En ese contexto, se supo que de las 40 cajas con documentación intervenida en los diversos registros realizados en la «operación Voramar», sólo quedan seis sin abrir. Este trámite está previsto culmine esta misma semana.