TW
0

OLGA QUINTANILLA-MADRID
El presidente del Govern, Jaume Matas, aseguró ayer que los resultados del referéndum sobre el Estatuto de Andalucía reflejan que las reformas de las cartas autonómicas «nunca» han sido una prioridad para los ciudadanos y aseguró que la baja participación confirma el «gran divorcio» que existe entre la realidad «y lo que los políticos creen que es la opinión pública».

Así lo expresó a los medios de comunicación durante el acto de inauguración de una nueva residencia en Marratxí, donde recalcó que tanto el referéndum estatuto andaluz como el Estatut catalán reflejan que «una cosa son los políticos y sus historias y otra los ciudadanos», al tiempo que subrayó que no le queda ninguna duda de que en Balears «la situación es similar». El presidente mantuvo que si en las Islas se hubiera realizado una consulta popular sobre la reforma estatutaria, «es muy probable que la participación hubiera sido todavía más baja que en Andalucía», e insistió en que la reforma del Estatut se produjo como «un mecanismo de autodefensa» porque otras comunidades autónomas estaban recibiendo financiación «que no les pertenecía».

Por otro lado, «la aprobación de la reforma del Estatut d'Autonomia será el mejor regalo que podamos recibir en el Dia de Balears», dijo ayer la vicepresidenta del Govern, Rosa Estaràs, durante su intervención en la Comisión de las Comunidades Autónomas del Senado, durante el penúltimo trámite que debe afrontar la quinta reforma del Estatut.