Imagen del metro en el puente sobre la carretera de Sóller, visto entre almendros. Foto: JOAN TORRES

Imagen del metro en el puente sobre la carretera de Sóller, visto entre almendros. Foto: JOAN TORRES

21/02/07 0:00
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J.J.SERRA
El metro empieza a andar. Una de las unidades dobles del nuevo transporte público realizó ayer su primera prueba en movimiento, a la que asistió la consellera d'Obres Públiques, Habitatge i Transports, Mabel Cabrer. Esta primera prueba consistió en un recorrido por la mañana entre el campus de la UIB y Son Sardina, y regreso, y otra vez por la tarde el trazado UIB-Son Sardina, aprovechando que este tramo ya está electrificado. Al tratarse de una primera prueba, la unidad no superó los 20 kilómetros por hora, cuando su velocidad máxima es de 100 kilómetros por hora. Según fuentes de la Conselleria, a partir de ahora las pruebas del metro serán prácticamente diarias, incorporando otras unidades (actualmente hay cuatro disponibles de las seis que completarán el sistema de transporte), aumentando paulatinamente las velocidades y ampliando los recorridos a medida que se extiendan los tramos electrificados. El objetivo es que el metro sea operativo al 100 por cien durante el próximo mes de abril.

Las seis unidades de metro fueron adjudicadas a Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles SA con un presupuesto de 14,5 millones de euros. Todas las unidades son dobles, es decir, pueden conducirse y tienen motor de tracción en ambos extremos. Se trata de cajas de acero inoxidable de 33 metros de longitud y 2,55 de ancho, con una capacidad máxima de 380 personas. Como ya se ha dicho, pueden alcanzar una velocidad máxima de 100 kilómetros por hora. Su capacidad máxima de aceleración es de 1,1 metros por segundo y de desaceleración, de 2 metros por segundo. El ancho de vía es de un metro y la tensión de electrificación, de 1.500 voltios.

Entre su equipamiento, se pueden destacar: sistema de frenado automático; comunicación por radio tren-tierra; ordenador de a bordo con comunicación de averías y anomalías, y registrador de incidencias; puertas eléctricas deslizantes (para que no puedan atrapar a ningún usuario); megafonía interior y exterior; intercomunicación entre maquinista y pasaje; circuito cerrado de televisión; paneles interiores de indicación de próxima estación; panel frontal de indicación de destino; climatización regulable; faros de largo alcance, plazas adaptadas a personas con movilidad reducida; e insonorización de ruedas.