El espectáculo de els Comediants en el acto institucional aportó colorido y realzó la figura de Ramon Llull. Foto: JOAN TORRES

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Con la puesta en escena de El llibre de les bèsties por parte de Els Comediants, extraído del séptimo Llibre de les Meravelles de Ramon Llull, comenzó ayer en el Auditórium el programa de actos deDia de les Illes Balears. Una representación que hizo las delicias de los asistentes. Sin embargo, muchos otros empezaron la fiesta en pleno Passeig Marítim de Palma donde disfrutaron del desfile de los gegants, capgrossos, xeremiers o dimonis.

ectacular iniciativa en estas fiestas que congregó a miles de ciudadanos. Pero, lo que podía haber sido un desfile brillante, quedó totalmente deslucido por la casi hora de retraso que tuvieron que aguantar tanto público como participantes. Una larga y pesada espera debido a que los cerca de 1.200 invitados a la entrega de las Medalles d'Or de la Comunitat Autònoma y los Premis Ramon Llul, además de todas las autoridades de Mallorca y Balears salieran a contemplar el desfile.

Eso sin contar el gran atasco de coches y las molestias que sufrieron cientos de personas por el corte y desvío de la circulación, a una hora punta en día laboral. Por cierto, gran y sonora pitada, de los ciudadanos, a la salida de los políticos del Auditórium. Pero bueno, la iniciativa, de esta primera desfilada fue de lo más concurrida. Miles de personas aguantaron pacientemente para contemplar el espectáculo que encabezaba la sección montada de la Policía Local de Palma y seguida por los Tamborers de la Sala.

Julián Aguirre