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PATRICIO CANDIA/JAVIER JIMÉNEZ
Funcionarios de la Agencia Tributaria en funciones de auxilio al magistrado instructor del «caso Andratx», Àlvaro Latorre, han confirmado, tras analizar y cruzar los datos recopilados en las últimas semanas, que el patrimonio de Eugenio Hidalgo y Jaume Gibert creció de manera irregular, sin que ambos puedan justificar el origen de ese enriquecimiento.

El informe, que ya está en poder del juez y del fiscal Anticorrupción de Balears, Juan Carrau, será una de las piezas angulares del interrogatorio al que el ex alcalde de Andratx y el celador municipal serán sometidos hoy, en el inicio del turno de declaraciones por la «operación Voramar».

Fuentes de la Guardia Civil confirmaron ayer a este diario un «espectacular aumento» del patrimonio de Hidalgo, más visible, si cabe, en el caso de Gibert. El Ministerio Público, como se sabe, calculó que ambos imputados registraron un aumento de sus respectivos patrimonios en unos tres millones de euros, que no han podido justificar.

En concreto, la Agencia Tributaria cifró en unos 600.000 euros el incremento del patrimonio que Hidalgo no ha podido justificar. El ex alcalde de Andratx, asimismo, ha admitido negocios ilícitos que generaron un beneficio muy superior a 1,8 millones de euros.

En el caso de Gibert, ese aumento injustificado del patrimonio es todavía más espectacular, ya que sus ingresos anuales, 20.000 euros, no le permiten justificar la adquisición de vehículos de lujo, fondos de inversión y un barco.

Rafael Perera y Jaume Gibert, abogados de ambos imputados, ya conocen el alcance del informe de la Agencia Tributaria, y esperan que sus clientes puedan justificar esos ingresos, supuestamente ilícitos. El fiscal acusa a ambos, por ese enriquecimiento injustificado, de un delito de blanqueo de capitales, que tiene una pena que alcanza los seis años de prisión. Además, les acusa de otros seis delitos: negociaciones prohibidas, cohecho, falsedad, contra la ordenación del territorio, tráfico de influencias y diversas falsedades documentales.

Hidalgo y Gibert han basado su defensa, hasta ahora, en que el origen de sus patrimonios no es delictivo, sino que fue generado «a través de golpes de suerte», en el caso de Hidalgo, que cobró en dos ocasiones décimos premiados de la Lotería, y por «herencia familiar» en lo que atañe a Gibert.

Hidalgo cobró cerca de cien millones de las antiguas pesetas con los décimos premiados, fue concesionario de una marca de coches y realizó diversas inversiones a través de las sociedades Eucar y Prollamp, junto a su hermano Carlos, también imputado en la causa. La Interpol ha rastreado en bancos suizos cuentas abiertas por el ex alcalde, sin éxito, por ahora.

Gibert, por su parte, ha declarado ante el juez que todo su patrimonio proviene de herencia familiar y de las ganancias obtenidas con la explotación de la tienda «Colorins», que figura a nombre de su mujer.

Sobre el incremento patrimonial sin justificar, según Hacienda, y todo el supuesto entramado urbanístico que ambos organizaron en Andratx, según el fiscal, serán interrogados hoy Hidalgo y Gibert.

También está previsto que comparezca hoy ante el juez, el fiscal y los abogados personados en el «caso Andratx» en calidad de testigo el abogado Fausto Morell Trujillo.