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El conseller d'Indústria, Comerç i Energia, Josep Juan Cardona, calculó ayer que el gasoducto que transportará gas natural entre la Península y Balears estará operativo en julio de 2009, después de que el Ministerio de Medio Ambiente haya concluido su evaluación de impacto ambiental del proyecto. La tramitación de esta evaluación llevaba ya tiempo en el Ministerio y este retraso había despertado cierta inquietud en el Govern y en Enagás, adjudicataria de la instalación del gasoducto.

Así pues, según los cálculos de Cardona, el próximo verano se iniciarían los preparativos de la instalación y durante la primavera y el otoño de 2008 -se evitarían obras durante la temporada turística estival- se trabajaría en el punto de partida (Denia, en la costa valenciana) y en las conexiones de llegada (Sant Antoni de Portmany, en Eivissa, y Sant Joan de Déu, en Mallorca). El tendido de la tubería submarina se realizaría entre el otoño de 2008 y el primer simestre de 2009, para, como ya se ha dicho, estar operativa en julio de 2009.

El retraso acumulado ha encarecido el proyecto hasta los 500 millones de euros.