El acto central consistirá en la formación de un gran mosaico humano en la Plaça Major a partir de las 18:00 horas, de modo similar al que se hizo en la Diada de 1996 con el lema «Som comunitat històrica».
El presidente y el coordinador de la OCB, Jaume Mateu y Tomeu Martí, explicaron que «todavía no hemos decidido el contenido exacto del mosaico, pero se referirá al futuro de la lengua catalana». En este sentido, Mateu declaró que «la lengua catalana ha sufrido durante estos cuatro últimos años una auténtica lluvia ácida. Es necesario que los mallorquines clamemos por el futuro de la lengua y que ésta ocupe el lugar que le corresponde por historia y por prestigio. El día 5 de mayo tiene que ser un día histórico».
La Diada culminará la campaña Sus Mallorca, también organizada por la OCB, que habrá visitado 40 poblaciones de la Isla, igualmente en defensa de la lengua.
Jaume Mateu indicó que «hemos detectado que la gente está muy animada y dispuesta a movilizarse». Tomeu Martí señaló que «la Diada tiene un claro componente reivindicativo para que los gobernantes de la próxima legislatura no pueden seguir practicando, como en estos últimos cuatro años, una política de tierra quemada».
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