Esperanza Pérez, la única mujer que ha realizado una singladura en solitario a través del Atlántico, ofreció ayer una conferencia en el Real Club Náutico de Palma, presentada por el periodista Juan Poyatos, en la que relató su travesía de 2.800 millas entre Canarias y Santa Lucía, en el Caribe.
A sus 38 años y sin ninguna ayuda exterior, a bordo deArchibald, un histórico sloop de 12 metros diseñado para cruceros polares, Esperanza emprendió la ruta el pasado día 30 de noviembre y culminó su reto personal el 23 de diciembre, llegando a la hora prevista.
«Se pasa muy mal. Hasta la primera mitad de la travesía tuve problemas todos los días. Me quedé sin batería, se rompió el piloto automático y de viento y hasta el ordenador de a bordo. Además, tenía que levantarme cada hora y media», indica Esperanza, quien, pese a capear un temporal de 40 nudos, asegura que en ningún momento se sintió angustiada. «Desde un principio afronté la travesía con esfuerzo e ilusión, sabía que iba a salir bien», señaló. Asimismo, lamenta que en España se den tan pocas mujeres navegantes solitarias.
El proyecto, denominado A solas en el Atlántico, se ha perfilado durante dos años y en unos meses se publicará en forma de libro. En este tiempo, la navegante y licenciada en Ciencias Físicas ha trabajado para preparar la expedición tanto a nivel técnico como personal. En su historial marinero, Esperanza también ha surcado el Pacífico, donde en el año 2000 recorrió 7.000 millas con dos tripulantes, hasta los mares de China donde llegó a bañarse con las ballenas.
Su iniciativa ha contado con la Asociación de Navegantes y la empresa mallorquina de obras e ingeniería Sampol, patrocinadora de la conferencia.
Gabriel Alomar
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