La imagen de Pep Rosselló puede decirse que forma parte del paisaje urbano de Capdellà, pues pasa gran parte del día sentado ante la puerta de su casa, viendo cómo transcurre la vida y cómo cambian las cosas, sin que por ello renuncie a sus recuerdos inolvidables, como inolvidables son las heridas que recibió a los cuatro días de llegar al frente de guerra en Teruel. «Tenía 18 años y pasé casi todo el día, solo, en el suelo, esperando que me vinieran a rescatar».
Y no olvida aquella «glosa» que la tropa recitaba en aquellas jornadas bélicas: «Son la cuarta Navarra/ de Camilo Alonso Vega,/ instituto invencible/ con ella no hay quien pueda./ Conquistamos todo el Norte,/ empezamos por Santander,/ estuvimos en Brunete/ y en Gijón poco después./ Continuamos el avance/ y llegamos a Viniaroz, y a la España de Negrín/ la hemos partido en dos».
Nacido en Alaró, estuvo trabajando dos años en las minas de carbón, para después dedicarse a la agricultura, en las tierras de los Puigdorfila, por lo que tuvo que ir a Capdellà, donde reside desde hace más de 50 años. Su aparición como personaje anónimo en un anuncio de un programa televisivo cultural propició nuestro encuentro, precisamente en uno de los pueblos más bellos de Mallorca, de los pocos que aún conservan su propia personalidad, a pesar de que «ahora, aquí, viven muchos extranjeros». Pep considera que Mallorca ha cambiado, «pero ahora se vive mejor, hay más comodidades».
Pep Roig
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