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Me enfrento un año más a la triste realidad -al menos para mí- del verano periodístico.
Y es que el verano de famosos, como decíamos antaño, se ha convertido actualmente en verano de mucha morralla y casquería y de pocos famosos.
Hace años, cuando comenzamos en ésto -sólo éramos unos pocos y no todos creíamos en ésto; yo sí, desde luego- el famoso era la resultante de algo meritorio. Un escritor, un actor, un cantante, un deportista, un torero, un político, un científico, un profesional. Alguien que tuviera algo que contar y que no se ciñera únicamente, como suele ocurrir ahora, a asuntos de la entrepierna, o al efecto de la silicona, o a que ha dejado preñada a tal o cual señorita o señora; alguien que además de ser hijo de, hiciera algo en este mundo, ¡qué se yo! trabajar, por ejemplo. Por eso me horroriza el verano.

Por eso, y porque cada año nos volveremos a encontrar los mismos, salvo alguna que otra excepción -por ejemplo: Mari Carmen Martínez Bordiu y su Jóse, ya que han comprado casa en Mallorca por lo cual, creo, van a dar juego-. Por lo demás tendremos que lidiar con Claudia Shiffer y sus silencios, ya que a pesar de los muchos años que lleva en la Isla no sabe decir gracias a los periodistas cuando la felicitan por su cumpleaños; los Kiryl de Bulgaria, que son los superfashion del verano, eso sí, muditos por propia decisión, que a lo mejor se traen como invitados a su páramo porrerenc a los herederos de la corona noruega; aterrizarán, seguro, los Obregón, probablemente con Ana al frente, que puede llegar: a) con su triquini y sin su Darek, por tanto cabreada y sin ganas de dar posados ni de hablar; b) con su novio, el Darek, que según en el plan que lleguen pueden ser hasta divertidos, y c) Darek solo (ayer, a última hora, se rumoreaba que ya estaba en Mallorca con un familiar); por supuesto, vendrán los Reyes con sus hijos, yernos y nietos, entre los que las infantas Leonor, por aquello de que ya anda, y Sofía, por ser nueva en este verano, serán las estrellas. ¡Hombre! Qué duda cabe que la Family es noticia siempre, y más en bañador. Aunque en bañador, excepto a doña Letizia, los hemos visto ya a todos, incluso a la Reina y a las nurses de los Duquecitos de Palma. Pero que vengan, que peor sería que no lo hicieran, ya que el verano, sin ellos, no sería el mismo. (Puede que la foto más esperada de este verano real sea, si ha lugar a ella, la que resulte de la visita que haga el Consell e Mallorca del PPALPIEFS, o Pacte per a l'estabilitat política i el futur sostenible, a Su Majestad, en Marivent. Me refiero a la foto del apretón de manos protocolario entre don Juan Carlos y Lladó, de Esquerra Republicana, y conseller d'Interior) ¿Qué quiénes más vendrán? Pues me imagino que el ex presidente del Barça, que a ver que opina si el Govern dice no a la fachada marítima de Palma, los toreros del papel de couché -Cayetano, su hermano, El Cordobés, Jesulín, etc.-, Carlos Sainz, el doctor Barraquer, los Cortina, Cristina Macaya, con sus fiestas a las que invitará a alguno de los políticos del Pacte, el modisto Valentino, que el año pasado no vino, Samuel Flores, El Pocero y su amigo, Ortega Cano, Bisbal, que llega para dar un concierto en la plaza de toros de Palma, Rafa Nadal (que llegó ayer) y su novia en bañador, tal vez Chenoa, seguramente Carolina Herrera, Concha Velasco... E imagino que como recursos tendremos a Silyan, al Rey de Noruega, a miss y míster Balears, dos concursos de belleza que cuentan con un jurado con más miembros que candidatos/as al podium. Y es que en este concurso, pesa más el jurado que las candidatas/tos, ya que sin jurado que lo patrocine, no hay concurso