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La fama de Punta Ballena no es extraña a la mayoría de los residentes de la Isla. El territorio es tradicionalmente conocido como el punto más «salvaje» de la marcha inglesa que predomina en la localidad de Magaluf sobre estas fechas. La zona que es conocida internacionalmente como uno de los puntos más fáciles de ligar de Europa, es la preferida por los jóvenes ingleses que buscan algo más que pasar el día en playas paradisiacas. Después de la cena, en los más de 100 hoteles de la zona, los jóvenes tienen un único objetivo: emborracharse hasta el amanecer y divertirse a toda costa. De la diversión se encarga las muchas discotecas y bares que realizan diversos juegos para que los turistas, en su mayoría hombres, no se aburran. El secreto está en la combinación infalible entre alcohol y sexo que muchas veces termina con hacer de la playa o de la propia calle, escenarios del sexo ocasional. La última novedad es la instalación, en los lavabos de las discotecas, de máquinas que expenden feromonas que aseguran garantizar el «sex-appeal» de los ingleses. La «ruta de la marcha» es ofrecida por muchas agencias que vieron en este recorrido por los bares y discotecas un buen negocio. Lo malo es que esta juerga desenfrenada, a veces, resulta en delincuencia. Pese a los esfuerzos de la Policía de Calvià para reforzar la seguridad en la zona, todavía es un punto muy atractivo para el tráfico y la prostitución. Además la ruta deja otro tipo de rastros: basura, vómito, orina y mobiliario urbano destrozado son factores comunes en Punta Ballena.