La titular del Juzgado de Instrucción 10 de Palma ha librado auto de imputación por presuntos delitos de malversación de fondos y apropiación indebida a Pau Ramis, con lo que los tres antiguos accionistas mayoritarios de la Policlínica Miramar se encuentran ante la magistrada con los mismos cargos respecto a la administración del centro sanitario hasta finales del pasado año.
La semana pasada se conoció un auto de la jueza Abrines en el que establecía una fianza de responsabilidad civil de 3'5 millones de euros a los accionistas Miquel Dalmau y Cristóbal Pizá, denunciados por Pau Ramis por los presuntos daños causados a los propietarios de la Policlínica y a la Hacienda Pública mediante una «doble contabilidad» que habría hurtado de su control importantes cantidades de dinero durante sucesivos ejercicios societarios.
Con el auto comunicado el martes -que toma en consideración una demanda presentada en su momento por el doctor Carlos Ferret-, la situación procesal de Pau Ramis es en ese Juzgado similar a la de quienes compartían la mayoría accionarial de Amebasa, los cuales también reclamaron para él, y tienen pendiente de prosperar o ser rechazada, una petición de de fianza de varios millones de auros para cubrir responsabilidades civiles.
El complejo procedimiento que instruye el Juzgado 10 de Palma respecto a los antiguos responsables de la Policlínica Miramar persigue aclarar también los pormenores de la contabilidad opaca que existía en la institución, y de la que el empleado encargado de su elaboración entregó copia en sede judicial concordando con algunas argumentaciones de la demanda de Ramis contra Pizá y Dalmau.
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