El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, opinó ayer sobre la retirada de Jaume Matas y de Josep Piqué de la política activa que «cuando un partido tiene unos activos tan valiosos, estén en primero o segundo puesto de la acción política, lo que tiene que hacer es contar con ellos».
En una entrevista con Efe, Ruiz-Gallardón se refirió al relevo en las direcciones del PP balear y catalán, y confió en que la misma «no pase factura» a su partido en los próximos comicios generales.
En opinión del alcalde de Madrid, el PP debe contar con los dos para que apoyen a «nuestros candidatos», y definió a ambos como personas valiosas a las que su partido debe mucho.
Sobre su próximo futuro político, aseguró que su «sitio» está en la capital de España, aunque defendió la compatibilidad del cargo que ocupa con su presencia en el Congreso de los Diputados porque sería «muy favorable» para la ciudad que su alcalde tuviese «voz» en el Parlamento.
Ruiz-Gallardón aseguró que su responsabilidad como alcalde sería, «por supuesto», compatible con un escaño en el Congreso.
«Es más, grandes alcaldes de Madrid han defendido la voz de esta ciudad en el Congreso; ahí está el ejemplo de Enrique Tierno o de Juan Barranco», apuntó Ruiz-Gallardón, quien opinó que sería «extraordinariamente positivo» que el alcalde «pudiese plantear» en la Cámara Baja lo que «esta ciudad necesita» para «saldar las deudas de todo tipo, legislativas, políticas, que el Gobierno tiene con los madrileños».
Insistió, además, preguntado sobre si aceptaría una cartera ministerial si el presidente del PP ganara las elecciones y lo eligiera para formar su Gobierno, que su «compromiso» es con la ciudad de Madrid.
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