La reforma del Estatut obliga a aprobar o revisar hasta 25 leyes que afectan al desarrollo estatutario, explicó ayer el conseller de Presidència y coordinador del Ejecutivo Albert Moragues en la primera de las comparecencias solicitadas por el Ejecutivo para explicar las principales propuestas que van a enviar a la Cámara.
El Parlament, tal y como reveló este diario el pasado 23 de septiembre, espera «tener mucho trabajo» y, por ese motivo, acordó incrementar más de un 10 por ciento las retribuciones de los diputados y diputadas.
Moragues, durante su comparecencia, en la que no faltó una trifulca entre PP y PSOE, informó de que la próxima semana retomarán las negociaciones para el traspaso de Justicia. Una de las nueve direcciones generales de esta conselleria, que asume competencias de tres anteriores, será precisamente de Justicia. El PP criticó ayer que se fueran a mantener dos direcciones generales con competencias muy parecidas: la de Justicia y Abogacía. La reunión acabó en bronca. Rodríguez (PP) no logró arrancar prácticamente nada. El PP intentó saber los planes del Ejecutivo sobre IB3, qué opinaba de tener a un consellera imputada (en relación a Nájera). Además criticó que no hubiera dado al PP ninguna presidencia de comisión. Joana Barceló (PSOE) les acusó de hacer victimismo. Rosa Estaràs protesto.
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