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La Fira Dolça d'Esporles batió el pasado domingo otro récord de asistencia de público, habida cuenta los múltiples alicientes que ésta ofrece a los visitantes.

En esta tercera edición, la Escola de Brodats i Randes d'Esporles, que dirige la profesora Catalina Trías, organizó en colaboración con el Ajuntament un encuentro de bordadoras al que se sumaron artesanas de veinticuatro pueblos de Mallorca y las representantes de Palma a través de la Asociación Balear de Encajes y Bordados.

Pertrechadas de sus tambores, tamborets, agujas y bolillos, realizaron en directo una muestra de sus habilidades, que despertaron el interés de los viandantes y, sobre todo, de los numerosos turistas extranjeros que no cesaban de alabar su destreza en los calados, punto mallorquín, de sombra y de cruz, además de las campanas de copinyes.

Las autoridades, encabezadas por el alcalde, Miquel Enseñat, visitaron la gran muestra instalada en el paseo central, felicitando a las señoras.

A. Estabén