P. Matas20/04/08 0:00
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El Grupo de Delincuencia Económica del CNP detuvo ayer a Damián Vidal, que fue director gerente de la empresa pública Bitel en la última etapa de Matas como president del Govern (2003-2007), y a otras tres personas identificadas como Alexandre G.H., de 30 años, Iván G.H., de 28 y Juan Antonio R.B., de 26 años de edad. Este último fue puesto en libertad a última hora.

A los tres últimos se les considera «cooperadores necesarios» para, presuntamente, malversar fondos públicos de acuerdo con el gerente de Bitel. Los arrestos se llevaron a cabo a primera hora de la mañana de ayer y todos quedaron ingresados en los calabozos de la Jefatura del CNP. De las investigaciones efectuadas se calcula que la cantidad que se habría malversado, durante los cuatro años citados, es de unos 700 mil euros.

Como se informó en la edición de ayer, la Fiscalía Anticorrupción recibió el pasado mes de marzo una denuncia del actual Consejo de Administración de Bitel, al haberse detectado indicios de una malversación de fondos. Tras las investigaciones efectuadas, la policía informa en una nota de prensa de que «esta malversación de fondos incluye el uso ilícito de una tarjeta de crédito de la que disponía el director gerente (Damián Vidal), con la que realizó importantes gastos con dinero público que no están justificados».

También se investigan las adjudicaciones de contratos «a dedo» por trabajos no efectuados, entre personas y/o sociedades, al frente de las cuales figuraban el resto de detenidos. Igualmente se ha constatado la existencia de dos préstamos de los fondos de Bitel, por importes de 27 y nueve mil euros, que al parecer se autoconcedió el director gerente.

Dentro del caudal de documentación que se ha intervenido, aparecen otros tipos de gastos que «llaman la atención». Por ejemplo, Vidal se autopagó 112.000 euros por encima del sueldo que tenía pactado con el Govern y hacía reintegros con la tarjeta de importantes cantidades de euros. También, con la tarjeta se efectuaban pagos de carburante para una embarcación de su propiedad, y otros gastos en superficies comerciales.

La primera sospecha contra Damián Vidal surgió en la Conselleria d'Economia cuando, al entrar el nuevo equipo de trabajo tras el pacto de centroizquierda, el ya ex gerente de Bitel solicitó utilizar por última vez su despacho. Al parecer, Vidal efectuó una serie de operaciones económicas, en las cuales habría reembolsado una importante cantidad de dinero.

A lo largo de la tarde de ayer la policía y el fiscal continuaron con las diligencias del caso, y se tomó declaración a la mayoría de los detenidos.