El coronel Albarracín asume la jefatura del Estado Mayor balear como «una noble aspiración»

Durante su intervención, el coronel Pina quiso agradecer el «extraordinario trabajo realizado por las unidades de tierra de este particular archipiélago». «Han sido dos años maravillosos y muy enriquecedores», aseguró el coronel, quien terminó su discurso alabando al comandante general Roldán y con un «Molts d'anys» como despedida.

El nuevo Jefe del Estado Mayor de la Comandancia General de Balears quiso recordar los 15 años que pasó destinado en el Cuartel General de Balears, 13 de ellos en el Estado Mayor. De ahí su «inmensa alegría»: «Asumir esta jefatura era una noble aspiración que siempre había tenido y que hoy se ha visto cumplido».

El coronel Albarracín fue destinado a las Islas en 1993, donde ocupó los cargos de jefe de Seguridad, responsable de Comunicación Pública y Relaciones Institucionales y asesor del comandante general de Balears, puesto que ha ocupado hasta la actualidad.

«Sólo seremos leales si somos fieles con nuestro compromiso de servir a España», dijo el coronel Albarracín tras incidir en la necesidad de trabajar con «franqueza y sinceridad». «Siempre hay que decir la verdad, por muy incómoda y difícil que sea». Albarracín quiso remarcar que es «fiel a las tradiciones, pero enemigo de la rutina», lo que significará «una permanente puesta al día». Por último, el comandante general Roldán cerró el acto agradeciendo la labor realizada por el coronel Pina, con quien aseguró haber logrado «el entendimiento necesario entre un comandante y su jefe del Estado Mayor». En cuanto al coronel Albarracín, le conminó a incidir en tres aspectos: colaborar con «la nueva organización del Ejército de Tierra», trabajar en «la operatividad de las unidades» y, por último, «potenciar y conservar el patrimonio histórico y cultural que el ejército posee en Balears».