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La Fiscalía de Balears pidió ayer a la juez que instruye la petición de suspensión del congreso del PP que no acepte la petición presentada por el alcalde de Calvià, Carlos Delgado. La Fiscalía, tras escuchar a las dos partes, señaló su desconocimiento si los cambios en el censo, que suponen el 1'5 por ciento del total, «afectan a una u otra parte», en alusión a Estaràs y Delgado. La fiscal justificó también que la suspensión del congreso tendría un alto coste económico para el PP. El presidente del congreso, Francesc Fiol, señaló que la suspensión del congreso podría costar más de 200.000 euros.

Los juzgados de primera instancia vivieron ayer una jornada inédita en Balears. No es habitual que dirigentes del mismo partido tengan que dirimir sus conflictos internos ante un tribunal. Los primeros en declarar fueron los testigos de Delgado, que asistió a toda la vista previa. En primer lugar intervino Antoni Rami, quien aseguró que había habido irregularidades en los censos. Pese a estas supuestas irregularidades, Rami desconocía si algún compromisario había presentado una reclamación por ser excluido del censo. En la misma línea se pronunciaron el resto de testigos, todos ellos vinculados profesionalmente a Delgado. Uno de ellos no sabía ni siquiera los motivos por los cuales en la mayoría de las juntas locales no hubo elección de compromisarios.

Por parte de la parte demandada, intervinieron como testigos Francesc Fiol, Joan Huguet, Pere Palau y Joan Ferragut. Fiol dijo que los cambios en los listados se produjeron para depurarlos porque se habían detectado errores. Huguet habló como miembro del comité de garantías nacional y confirmó que se había actuado correctamente. Pere Palau declaró que en un sólo día, y después de la convocatoria del congreso, se habían dado de alta 49 afiliados en un municipio pitiuso. Algunos de ellos pretendía ser compromisarios.

Al concluir las declaraciones, el abogado de Delgado, Antoni Verd, pidió la suspensión cautelar del congreso. Bartomeu Vidal, en representación del PP balear, insinuó que Delgado buscaba una excusa ante una probable derrota en el congreso. Al concluir la vista, Delgado declaró: «Se ha demostrado que ha habido irregularidades». La juez se tiene que pronunciar antes del sábado sobre la suspensión o no del congreso.