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Algunos de los niños saharauis que pasarán el verano con familias de acogida acudieron ayer a una visita con el oftalmólogo de la ONCE, el doctor José Antonio Bonales Daimiel. Estas revisiones se realizan en dos partes: una que tuvo lugar ayer y en la que estaba previsto que acudieran nueve niños y otra que se realizará mañana con la asistencia de siete niños. Las consultas se realizaron en la delegación territorial de la ONCE, ya que esta organización colabora con la Associació de Amics del Poble Saharaui en el programa «Vacances en pau».

Marian, de siete años, fue la primera niña en hacerse la revisión que fue un tanto complicada ya que la pequeña no habla español y no había ningún intérprete que facilitará la comunicación entre ella y el doctor. María, su madre de acogida, se mostró un tanto disgustada con esta situación.

Es la primera vez que Marian viene a la Isla. Para María esta es su segunda experiencia, ya que durante cinco años acogió a Lala, una niña con estrabismo que también debería haber venido este verano a Mallorca para someterse a la revisión anual pero que finalmente no ha venido.

La pequeña Embarcalina, de siete años, fue otra de las que puso su vista a punto con esta revisión. Un poco asustada por el desconocimiento, la niña se sometió a las distintas pruebas oftalmológicas que el doctor Bonales le iba realizando. También hubo un problema de comunicación debido al idioma que se fue saldando con el lenguaje universal de los signos.

Todos los pequeños iban acompañados por sus familias que los acogen durante sus vacaciones en la Isla. Tras las revisiones, y si era necesaria la prescripción de lentes, se les derivó a diversas ópticas que también colaboran en este proyecto.

Estos chavales disfrutarán de un verano en la Isla, aunque este año se van algo más pronto que en anteriores años, concretamente el 19 de agosto. Hasta entonces les dará tiempo para disfrutar de la playa, la piscina, los juegos y el ambiente festivo, lejos de la pobreza y la penuria que vive su pueblo.