Creu Roja Balears atendió a lo largo de 2007 a 274.746 personas, 34.000 más que en 2006. El año pasado, la entidad llevó a cabo 76 proyectos que llegaron a 240.909 personas en las Islas y a 33.837 beneficiarios de países del Tercer Mundo.
Miquel Alenyà, presidente de Creu Roja Balears, quiso destacar la atención social prestada por la institución a través de los programas dedicados a personas mayores con discapacidad. «Nuestro objetivo es mejorar la calidad de vida de las personas que más lo necesitan», dijo Alenyà.
En 2007, la Creu Roja desarrolló a través de su oficina autonómica y de las otras 15 locales que la entidad tiene en Mallorca, Menorca y Eivissa un total de 76 proyectos. Para llevar a cabo esta labor, la institución contó con 2.792 voluntarios, 14.805 socios y 615 trabajadores, particulares, empresas e instituciones.
Las iniciativas desarrolladas fuera de Balears contemplaron actuaciones de emergencia en Perú tras el terremoto y en Bangladesh tras el ciclón Sidr, además de proyectos de desarrollo y cooperación internacional en Ecuador y Bolivia.
Alenyà remarcó la proyección del programa de teleasistencia móvil para mujeres víctimas de violencia de género, ya que el número de usuarios pasó de las 147 en 2006 a las 240 de 2007.
Otro de los programas que Alenyà destacó fue el proyecto Incorpora, que en su primer año de vida atendió a 104 mujeres con dificultades para incorporarse al mercado laboral. Además, Creu Roja ofreció orientación laboral a 90 jóvenes en riesgo de exclusión social de ambos sexos a través del Servicio de Orientación Laboral.
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