TW
0

Las calles de Palma amanecieron ayer mojadas como consecuencia de un pequeño chaparrón y el cielo encapotado. La meteorología reinante el domingo por la mañana no animó a la gente, como viene siendo habitual en esta época, a acudir masivamente a las playas.

Zonas como Cala Major, Can Pere Antoni, Ciutat Jardí o Can Pastilla, registraron ayer una afluencia muy inferior a la de otros domingos.
El cambio de tiempo, con una bajada del mercurio y un cielo con nubes y claros, fue suficiente para que mucha gente descartara la opción de la playa para pasar un día de descanso.

El Instituto Nacional de Meteorología prevé para hoy un predominio de los cielos pocos nubosos y unas temperaturas máximas que rondarán los 27º. El martes no se prevén cambios sustanciales, mientras que la nubosidad empezará a hacer acto de presencia del miércoles, con posibilidad de chubascos, ocasionalmente acompañados de tormentas. El jueves también se podría registrar algún chubasco ocasional, aunque empiezan a subir ligeramente las temperaturas.

R.D