Dani Pedrosa, que lleva una discreta venda en el tobillo derecho y otra en el dedo índice de su mano izquierda, le pone crema a su novia.

Dani Pedrosa, que lleva una discreta venda en el tobillo derecho y otra en el dedo índice de su mano izquierda, le pone crema a su novia.

28/07/08 0:00
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El tricampeón del mundo de motociclismo (una vez en 125 y dos en 250) Dani Pedrosa, en compañía de su novia Bet, descansan en Mallorca.
Dani, que ha tenido que hacer un paréntesis obligado por la caída que sufrió en Sachsenring durante la disputa del GP de Alemania, lo que además de no puntuar en este circuito le impidió participar en el GP de América, tiene su vista puesta en Brno, donde se disputara el GP de la República Checa. Aparte sigue pensando que, a pesar de no poder disputar dos carreras seguida por la lesión sufrida en Alemania, tiene aun posibilidades de conseguir el campeonato del mundo GP. Lo piensa él y lo piensa también Alberto Puig, su manager. Ahora, en Mallorca, intenta recuperarse a base de guardar reposo y de disfrutar de la compañía de su novia, que es también de Sabadell.

Desde que Pedrosa llegó a Mallorca, casi todos los días ha salido a navegar, buscando calas tranquilas y huyendo de la aglomeración y de las cámaras. Y... Pues, ¡helos ahí! Tan tranquilos, tan relajados, a bordo del barco, poniéndose crema el uno al otro, leyendo y tomando el sol, sobre todo él, que como camina con muletas, no esta para muchos trajines y chapuzones, si no más bien para recuperarse, porque, insistimos, su objetivo es el GP de la República Checa, en Brno.

Pedro Prieto