TW
0

Miles de personas venidas de todos los rincones de Mallorca visitaron Pollença el viernes por la noche para celebrar la tradicional fiesta de la Alborada. El goteo de coches que llegaban al municipio fue constante desde las nueve de la noche y llegó colapsar la entrada del pueblo. Pero eso no desanimó a los visitantes que, cargados con neveras y bebida, volvieron a llenar las estrechas calles del centro de música, color i alcohol. El Ajuntament quiso que este año la fiesta fuera un poco más cívica. Por ello, impulsó la campaña El civisme se'n va de festa con la que se quería promover el uso de los lavabos públicos y la utilización de vasos reutilizables, entre otras medidas.

La Alborada contó, como cada año, con tres escenarios diferentes. De este modo, la plaza de Ca les Monnares acogió la música electrónica de los DJ pollencins Patako, Norai, Pako, Numek_Full-Attack y Enigma y la plaza dels Seglars contó con las actuaciones de The Doldrums, Teenage Head, Verypomelo, No Sabemos y Soul.

La fiesta de la plaza Major la amenizaron los grupos Valnou, Cocktail i Pelucon Flowers. Pero, como manda la tradición, a las cinco de la mañana este espacio quedó totalmente en silencio para escuchar la Alborada en el que, para muchos pollencins es el mejor momento de la noche. Los pollencins escucharon con emoción las notas que entonó la banda de música, que acto seguido recorrió las calles del pueblo en su tradicional itinerario y ante la mirada de jóvenes y turistas.

Aunque la Policia Local de Pollença había amenazado con no hacer horas extra durante la Alborada, finalmente el pasado jueves el Ajuntament llegó a un acuerdo con los agentes y la fiesta sí contó con sus servicios. De este modo, no fue necesario que la Guardia Civil asumiera la seguridad y la fiesta discurrió con normalidad.