Según la asociación convocante, a quien respalda en su denuncia el sindicato CGT, fruto del acuerdo bilateral hispano-senegalés para combatir la inmigración ilegal, los trabajadores fueron reclutados en Senegal como electromecánicos, pero desde su llegada a Mallorca han sido empleados como maleteros en el aeropuerto.
Siempre según la misma fuente, su contrato suscrito en abril pasado -con la supervisión del cónsul español en la capital senegalesa- era de 40 horas semanales, pero la contratante les remitió cartas el 31 de julio en las que les comunica el cese de su actividad y la invitación a firmar nuevos contratos eventuales hasta el 15 de abril de 2009, que pasarían a ser de 24 horas semanales.
El último párrafo de la carta de la empresa a los trabajadores indica que el rechazo a su oferta de contratación tendrá «los efectos derivados de la misma», lo que significa para los senegaleses no solo el despido sino su expulsión de España, al no justificar desde entonces un permiso de trabajo y estancia.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.