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La barriada de es Molinar de Llevant vivió de forma muy especial la multitudinaria procesión terrestre marítima en honor a su patrona la Verge del Remei, algo que hacía temer su suspensión a causa del fuerte viento.

Con mucha expectación, la Verge del Remei salió del templo parroquial de es Molinar precedia por a banda de La Esperanza y miembros de su cofradía. Fue portada a hombros por miembros de las directivas de los cubs náuticos y presidentes de asociaciones vecinales, junto a la concejal del Ajuntament de Palma, Catalina Cirer, seguidos de centenares de personas.

El cortejo siguió hacia la esquina del Club Marítimo donde se efectuó el primer relevo, portando la imagen en este instante, socios y familiares de la embarcación porteadora 2008, actividad que este año recayó en el elegante «llaüt» mallorquín Villa de Hero, (1944) propiedad de Toni Fiol y Kica Jordá. La procesión discurrió por el muro del paseo marítimo repleto de gente hasta llegar al Club Náutico Portitxol. Allí, sobre una tarima fue colocada la Virgen y la banda interpretó la pieza «Caridad del guadalquivir». A continuación fue depositada en el «llaüt» Villa de Hero, que lució iluminada decoración, poniendo proa hacia Ciutat Jardí, seguida de numerosas embarcaciones de recreo formando una típica procesión marítima. Antes de regresar a tierra, se realizó una parada, y desde la costa se encendieron fuegos artificiales. La comitiva de barcas pasó delante y entraron en el club Portitixol las primeras. Por último el «Villa de Haro» con la imagen, que fue recogida por las mujeres de Es Molinar para devolverla al templo, como manda la tradición, mientras se cantaba la Salve Marinera.