Familiares de Juan Francisco Gosálbez insultaron y agredieron ayer en el exterior de los Juzgados de Vía Alemania a varios periodistas que cubrían la declaración del imputado en el caso de Turisme Jove.
El peor parado fue el redactor de 'Diario de Mallorca', Mateu Ferrer, que fue asido con fuerza por un brazo y por el cuello por parte de un individuo que resultó ser tío de Gosálbez. La agresión, acompañada de toda clase de insultos, no llegó a mayores por la rápida intervención de un agente del Cuerpo Nacional de Policía, que hubo de emplearse a fondo para separar al agresor de su víctima.
La esperpéntica escena tuvo lugar a primera hora de la tarde, cuando se procedía al traslado a prisión de Juan Francisco Gosálbez, tras prestar testimonio judicial por espacio de varias horas. El imputado pudo presenciar los hechos sentado en la parte trasera del coche policial, pues fueron los dos agentes encargados de su custodia quienes hubieron de contener a duras penas sus familiares y amigos, mientras pedían refuerzos.
Mientras el agresor se resistía a la intervención policial y arreciaba sus insultos contra quienes grababan imágenes y fotografiaban la escena, una mujer que lo acompañaba lanzó contra el resto de los reporteros un abanico e intentó agredirlos, lo que también impidió el contingente policial.
Hasta ese momento, Gosálbez había protagonizado su primera y extensa -casi seis horas- declaración judicial ante las graves imputaciones que sobre él recaen en el caso Turisme Jove, insistió en que sus superiores en el consorcio público, Juan Francisco Gálvez y Damià Amengual, estaban al corriente de todas y cada una de sus actividades.
Con respecto a Amengual, el imputado relató ante todas las partes personadas que le vio destruyendo documentación cuando le comunicaron su despido. También le identificó como la persona con la que repartió 18.957 euros en plena calle, contra una factura falsa de Fanodi, empresa de la que él es propietario, en una operación sugerida por Gálvez, ex director general de Joventut.
Gosálbez señaló también que tanto Gálvez como Amengual sabían que era propietario, junto a su ex compañera sentimental, de la mayoría del capital social de la empresa que alquiló a Turisme Jove el local de la calle Vidal y Sureda, y que nunca manifestaron su disconformidad, por lo que redactó un contrato de muy largo plazo con pago íntegro asegurado, y él mismo se encargó de fijar la renta mensual.
A la parte de la declaración de Gosálbez ante representantes de otros imputados, se sumó ayer un letrado que sólo horas antes había acreditado la representación de Damià Amengual.
De esa forma, el abogado Bartomeu Vidal ya representa únicamente al también imputado Juan Francisco Gálvez.
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