Una treintena de personas se concentró ayer en la calle del Temple, donde daba parte de la casa del alcalde republicano asesinado, Emili Darder, y que hoy es sede del edificio de la Delegación de Defensa, para exigir al Gobierno que retorne los bienes expoliados durante el franquismo y la represión.
La concentración fue convocada por Esquerra-Palma y transcurrió de forma pacífica.
«Ayer se cumplieron 70 años desde que el ejército fascista se apropió de la casa que pertenecía legítimamente a los familiares del alcalde republicano», denunciaron miembros de la agrupación política.
«Muchos querrían que esta fecha no existiera, ya que hace que más de uno se avergüence, pero Esquerra ni olvida ni perdona».
Helena Inglada, presidenta de la sección local de Esquerra-Palma, dio lectura al manifiesto en el que se denunció la expoliación del Estado.
«Todos los ciudadanos de la República perdieron alguna cosa», recordaron.
«Después del silencio... 40 años de dictadura y 30 de democracia cabe hacer justicia. No hurgar en viejas heridas, como algunos afirman».
Las actuaciones del juez Garzón abren una vía para trabajar en aquello que quedó mal resuelto en la Ley de la Memoria Histórica.
Los aspectos que desde Esquerra no aborda la citada ley son «la revisión de los casos de desapariciones, la posibilidad de abrir las fosas y las condenas a los perseguidores».
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