Espiral es el nombre de una asociación de Palma que lleva funcionando cinco años y hace apenas un mes han comenzado un proyecto más: Obert. Se trata de una iniciativa que abarca la zona litoral de Palma que incluye es Molinar, Coll d'en Rabassa y s'Arenal. El programa Obert, que cuenta con cinco monitores y una trabajadora social, está divido en bloques: el servicio de ocio y ludoteca, el servicio de acompañamiento y el de apoyo.
El servicio de ocio y ludoteca está destinado a jóvenes entre 3 y 12 años cuyas familias no pueden cuidar de sus niños una vez terminan las clases. Se trata básicamente de educar en el juego, «de utilizar el juego como elemento de comunicación y socialización», explica la responsable de Obert, Marga Gayà. La ludoteca se encuentra en el colegio público del Coll d'en Rabassa y está abierta de lunes a viernes, de 15.30 a 20.00 horas.
El servicio de acompañamiento, quizás el más novedoso, está ideado para aquellas familias en las que los padres o madres no se pueden hacer cargos de sus hijos en las horas no lectivas. En estos casos, los monitores acompañan a los niños y niñas, de casa al colegio o viceversa, y permanecen junto a los menores hasta que comienzan las clases o hasta que vuelvan los padres del trabajo. Este servicio quiere evitar que los menores estén solos y ayudar a conciliar la vida familiar y laboral.
Alex Cabot
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