Las incansables colaboradoras del Club Elsa.

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Con precios anticrisis y muchas oportunidades para adquirir cosas nuevas a precios muy por debajo de su valor, se abrió ayer el tradicional rastrillo benéfico del Club Elsa, en el Pueblo Español. La Sala Magna acoge desde las 10 de la mañana hasta las 18 horas de hoy, y mañana sábado, infinidad de prendas, objetos, juguetes, muebles, libros, discos, bisutería, etc con el objetivo de recaudar fondos con los que ayudar a los más necesitados en los proyectos del Club Elsa que preside Margarita Mateu.

Precisamente, por motivos personales, la presidenta no pudo estar ayer presente en la visita inaugural junto al teniente de alcalde de Palma Eberhard Grosske, quien fue recibido por la vicepresidenta, Rafi Cordoba.

A pesar de su delicado estado de salud, Joana Walker quiso estar presente en la mañana de ayer y ver a las «chicas». Muchas e incansables colaboradoras y voluntarias que durante todo el día estuvieron atendiendo a los numerosos clientes que buscaron y consiguieron auténticos chollos. En el puesto de los libros se podían encontrar novedades a dos euros. Cuadros, no de conocidos pintores, pero muy bonitos a precios increíbles, e incluso adquirir un completo comedor, con sillas, mesas y aparador en perfecto estado. Los juguetes es otro punto de encuentro para quienes adelantan sus compras de Navidad. Pero la sección estrella podría ser la de moda. Prendas para mujer y caballero, en todas las tallas a unos precios de ocasión. Al igual que zapatos de magnífica calidad. Mañana sábado, los amantes del arte y la pintura tienen una la subasta de cuadros a las doce del mediodía, donde autores como Onofre Prohens, Tolo Albertí o Sobrado han donado algunas obras.

Sin duda, un rastrillo que ayuda a comprar cosas en tiempo de crisis y que ayuda a los más necesitados.

Julián Aguirre

(texto y fotos)