El Consell aprobó ayer de forma inicial en un pleno extraordinario la revisión del Pla Director Sectorial de Carreteres, que incluye 33'6 kilómetros de nuevos autovías y desdoblamientos y elimina el antiguo segundo cinturón y la polémica autovía entre Inca y Manacor. PSOE, Bloc y UM dieron el visto bueno a la iniciativa y el PP se abstuvo a la espera de ver el proyecto final, que deberá superar el periodo de alegaciones (dos meses) y otros seis meses.
El plan se desarrollará en dos fases. La primera, de 2009 a 2016, supondrá una inversión de 600 millones de euros e incluirá las obras del convenio de carreteras firmado con el Ministerio de Fomento. La segunda, de 2017 a 2024, significará otra inversión de 300 millones.
Entre los proyectos de la primera fase se ha incluido el nuevo segundo cinturón, que se considera una «autovía urbana» de 12'7 kilómetros, de los cuales 3'2 son de nuevo trazado (y no 1'4 como el equipo de gobierno cuando presentó el proyecto) y costará unos 115 millones de euros. También se prolongará la autovía de Peguera a Andratx.
La segunda fase prevé la autovía de Andratx al Port d'Andratx (1'8 kilómetros), la de Llucmajor a Campos (9'2 kilómetros) y la de Manacor a Sant Llorenç (4'6 kilómetros). También se incluyen terceros carriles en las autovías que van de Palma a Inca, de Palma a Palmanova y del aeropuerto a s'Arenal.
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