El anuncio de que la crisis en los mercados emisores retrasará la apertura de muchos de los hoteles de Balears hasta la segunda quincena de mayo, preocupa a los sindicatos mayoritarios de las Islas -UGT, CCOO y USO- que piden al Govern que incremente los niveles de protección social especialmente sobre los trabajadores fijos discontinuos.
La afiliación a la Seguridad Social de los trabajadores fijos discontinuos alcanza en plena temporada turística los 49.934 trabajadores en julio, según los datos de 2008, lo que refleja la importancia de este colectivo laboral en el sector turístico.
Aunque la contratación de los fijos discontinuos en el sector de la hostelería está regulada por el convenio del sector (2008-2011), los sindicatos temen que la actual situación de crisis pueda perjudicar a estos trabajadores y que, en algunos casos, incluso se pueda llegar a incumplir el convenio.
Katiana Vicens, secretaria general de CCOO, pidió ayer al president Antich y a la consellera de Treball i Formació, Joana Barceló, que se incrementen los niveles de protección social de los trabajadores y especialmente en el caso de los fijos discontinuos.
Los responsables de Ocupación de CCOO y UGT, Rafel Borrás y Manel Pelarda, respectivamente, coinciden en manifestar su preocupación por el hecho que que si se acorta la temporada turística los fijos discontinuos pueden tener problemas para trabajar los seis meses necesarios para posteriormente poder cobrar prestación por desempleo, opinión compartida por el secretario general de USO Balears, David Díaz. «No sólo nos preocupa que los fijos discontinuos no puedan trabajar los seis meses, nos preocupa que no les llamen para empezar a trabajar» afirma Pelarda.
Borrás puntualiza que también es preocupante lo que está pasando con los trabajadores eventuales que trabajan en el sector de la hostelería balear «a los que no están llamando».
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