13/07/09 0:00
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L.TERRASA Prudencia en el Bloc, escepticismo en UM y rechazo en el PP. Las primeras reacciones de las formaciones políticas ante la propuesta definitiva del Gobierno central para mejorar el sistema de financiación de Balears con el nuevo modelo coinciden en un aspecto: no convencen.

Miquel Àngel Flaquer, nuevo presidente de Unió Mallorquina, señaló ayer que «no conocemos la letra pequeña del acuerdo, pero nosotros aspirábamos a 3.000 euros por habitante y año, y eso supone que cualquier cifra por debajo de 700 millones de euros es insuficiente». En opinión de Flaquer, la propuesta del Gobierno central «no tiene en cuenta el déficit histórico de financiación que padece Balears ni el compromiso que asumió Zapatero». Aunque desde UM se valora el esfuerzo negociador del PSOE de las Islas, «creemos que hay falta de sensibilidad por parte del Gobierno central». UM critica la ambigüedad que supone garantizar que la comunidad llegue a la media nacional en financiación per cápita a base de disminuir en la medida de lo necesario su aportación al Fondo de Suficiencia, y se pregunta si se podrá presupuestar cada año esa cantidad.

Por su parte, Biel Barceló, portavoz del Bloc en el Parlament, se mostró prudente a la hora de valorar la propuesta de financiación. «Primero analizaremos las cifras, pero por lo pronto faltan cosas a tener en cuenta, como el déficit histórico de Balears, y no sabemos lo que pagaremos cada año al Fondo de Suficiencia». En opinión de Barceló, que Balears esté en la media nacional en financiación per cápita «es una reclamación de mínimos, éstas no son cifras para tirar cohetes, no se trata de un superacuerdo».

La presidenta del PP de Balears, Rosa Estaràs, considera que para estar en la media de financiación per cápita Balears debería recibir entre 600 y 1.000 millones de euros, «y todo lo que esté por debajo es un mal acuerdo». La eurodiputada recordó que «sólo la actualización de la población, que es algo que se debería haber hecho hace tiempo, supone 200 millones de euros, así que con esta propuesta realmente sólo nos dan 180 millones más».

Para Rosa Estaràs, «no es de recibo que la aplicación del nuevo sistema de financiación se aplace a tres años, porque encima seguiremos perdiendo dinero, y además ese retraso supone que para cuando esté en marcha el nuevo modelo seguro que Zapatero ya no está en el Gobierno».