«Rudi Bay fue un gran hombre»

Ayer por la mañana, con el fin de recordar un poco su vida y la historia de la aviación que fue elaborando a lo largo de la misma, hablamos con Susana Oliver, la mujer que permaneció a su lado hasta el último momento en que estuvo en este mundo.

Spantax -recuerda Susana- se puso en marcha en 1959, hace cincuenta años, y Canarias fue su primera base. Luego se estableció en Palma. Rudi fue quien proyectó su creación, contando para ello con la colaboración de Marta Estades, que durante muchos años fue azafata de Iberia. Es una mujer emprendedora, luchadora y muy inteligente. Ahora vive en Madrid, y me ha dicho que, a poco que pueda, el 27 estará en Palma».

Susana fue azafata de Spantax y, posteriormente, jefe de ventas de a bordo. «Rudi nació en Cádiz, hijo de danés y de inglesa. Presumía de español por haber nacido en España y por, pudiendo acogerse a la nacionalidad inglesa y británica, haber optado por la española. Por tanto -solía decir- soy español por tres motivos». Su padre hubiera querido que se dedicara al comercio; de hecho, estaba estudiando para ello en Inglaterra, pero a él le apasionaba la aviación. Quería volar. Y como el vuelo de Limberg le impactó mucho, se lo hizo saber a su padre».

Susana confiesa que Rudi era un visionario, que no se limitaba a lo que conocía y tenía una enorme humildad; tenía también una gran capacidad para acercarse a la gente, era persona sociable al máximo, y amigo de sus amigos de los que nunca se ha desvinculado».

Antes de crear Spantax, Bay fue piloto de Iberia durante muchos años. «¿Que por qué monta Spantax, una compañía charter? Entre otras cosas, porque tenía una idea muy precisa de futuro y quiso hacerla realidad. El vio que el mundo era mucho más pequeño a través de la aviación; que gracias a ella se podía viajar infinitamente más rápido, pero que también era un medio muy limitado a unas posibilidades económicas. Por ello, buscó la fórmula de mover gente a menor precio y al mismo tiempo abrió nuevos mercados; entre otros, Japón. Spantax voló a Japón y trajo japoneses a España, tanto es así que uno de los primeros aviones que pisó el nuevo aeropuerto de Tokio el día de su inauguración fue de Spantax».