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El president del Govern y secretario general del PSIB, Francesc Antich, comento ayer que no se plantea echar del Govern «ni al Bloc y a nadie» porque «todos hacen falta».

Antich, en los pasillos del Parlament, respondió a una pregunta de este periódico sobre si barajaba gobernar sin el Bloc y tender la mano a UM como plantean algunas voces.

Esta valoración de Antich se produjo un día después de la declaración de la presidenta del Parlament, en calidad de imputada, a raíz del 'caso Can Domenge' y durante una jornada en la que el Bloc volvió a insistir en la necesidad de que «UM se regenere». Biel Barceló, secretario general del PSM y portavoz del Bloc, dijo que UM debería «reflexionar» sobre la continuidad de Munar en la presidencia del Parlament si bien no pidió expresamente la dimisión, como si hace Esquerra Unida, que también forma parte del Bloc.

Lo que sí dijo Biel Barceló es que si Munar o Nadal (conseller de Turisme, también imputado) fueran de su partido ya habrían dimitido. Barceló dijo que acepta la 'doctrina' socialista de que sólo se exigirán dimisiones en caso de que se impongan medidas cautelares tras una imputación. «El propio Nadal dijo que dimitiría si eso se producía», precisó Barceló. El dirigente del Bloc precisó que no se plantea ahora abandonar el Govern aunque Nadal continúe.

La polémica, también avivada por el Bloc, partió ayer por la decisión de Munar de citar a los medios de comunicación en el Parlament para hacer una breve declaración tras declarar ante el juez. El Bloc lo critico pero el PSIB, aunque lo consideró «poco adecuado», mantuvo que «complicado» hacer declaraciones «con gente que le gritaba» y «lanzaba expresiones machistas», según precisó el diputado Diéguez. Fiol (PP) dijo que no le parecía mal pues Munar preside el Parlament.